28 feb 2013

La Orana María o Ave María, 1891, Paul Gauguin



Pintor: Paul Gauguin
Título: “La Orana María, (Ave María)”
Técnica: Óleo sobre tela
 Año de realización: 1891
Medidas: 109 X 86 cm
Arte y Pintura Clásica, Cuadros famosos
Esta obra hace parte de los cuadros más famosos de la pintura universal
La obra se encuentra en:
METROPOLITAN MUSEUM OF ART NUEVA YORK, USA



·   La Orana Maria (Ave María) fue pintado en 1891, durante el período tahitiano de Gauguin. Este era un místico y pintó cierto número de cuadros religiosos. En una carta fechada en 1892, describió parcialmente esta obra de la manera siguiente: «Un ángel con alas amarillas muestra a dos mujeres tahitianas a María y a Jesús, también tahitianos.» Se trata de un hermoso ejemplo de estilo innovador de Gauguin: una síntesis de las formas artísticas de Oriente y del estilo sencillo del arte primitivo, interpretado por un gran artista francés. La mayor contribución de Gauguin al arte moderno fue la tremenda expansión del concepto de arte y una comprensión de las artes primitivas. Al enfatizar la importancia en pintura de la decoración, de la superficie, de las armonías de colores puros, intensa y arbitraria, sin luces ni sombras, Gauguin se convirtió en uno de los pintores más originales en la historia del arte. 

Rosas y anémonas, Vincent Van Gogh



Pintor: Vincent Van Gogh, VAN GOGH
Título: “Rosas y anémonas”
Técnica: Óleo sobre tela
 Año de realización: Se desconoce
Medidas: 56 X 56 cm
Arte y Pintura Clásica, Cuadros famosos
Esta obra hace parte de los cuadros más famosos de la pintura universal
La obra se encuentra en:
MUSÉE DU JEU DE PAUME, PARÍS


·      Vincent Van Gogh inició su trabajo serio de artista en 1880, al cumplir los veinte siete años. Antes de esto, sólo había realizado varios dibujos ocasionales, alguno de los cuales aparece en sus primeras cartas a su hermano Theo. Van Gogh se convirtió en pintor debido a que le habían fallado otros medios de expresión. Durante los primeros dos o tres años después de dejar la religión, Van Gogh dedicó la mayor parte de su tiempo al dibujo. Su primitiva pintura «holandesa» se caracteriza por la utilización de colores oscuros, formas pesadas y temas inspirados en los campesinos holandeses y belgas, y en su trabajo. Después de su llegada a París, en 1886, tuvo lugar un cambio total en su paleta y en sus temas. Adoptó las técnicas impresionistas, especialmente el concepto puntillista de Seurat, y pintó flores, vistas de París y retratos que le permitieron experimentar aquellas nuevas ideas.

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